La fijación de precios dinámica (o precios de aumento) es un concepto a menudo mal entendido en la industria de viajes. La idea de que las aerolíneas bajen los precios para llenar asientos suena como una manera atractiva para que los viajeros con presupuesto limitado obtengan una buena oferta, ¿verdad? Pero los cambios de precio pueden ser difíciles de predecir, y la gente a menudo se deja llevar por conceptos erróneos y suposiciones comunes. Para aprender cómo convertirte en un viajero más inteligente con presupuesto limitado, tenemos el desglose de qué es la fijación de precios dinámica y cómo puedes usarla para obtener la mejor oferta posible.
Qué es la Fijación de Precios Dinámica
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La fijación de precios dinámica se refiere a cuando un producto o servicio cambia de precio dependiendo de una serie de factores potenciales. Las empresas hacen esto por muchas razones, como aprovechar el aumento de la demanda, deshacerse de existencias excesivas o atraer nuevos clientes. Los precios de aumento, donde una empresa aumenta los precios debido a la alta demanda, son una forma de fijación de precios dinámica, pero no toda fijación de precios dinámica incluye aumentos de precios. La fijación de precios dinámica se utiliza con frecuencia en la industria de viajes, con vuelos, hoteles, alquiler de autos y cruceros ajustando regularmente sus precios. Esto significa que exactamente el mismo viaje puede costar dos precios muy diferentes si se realiza en diferentes momentos del año.
Reservar de Último Momento
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Las aerolíneas, los hoteles y los cruceros a menudo ajustan sus precios a medida que se acerca la fecha de la reserva. Si la demanda es alta, aumentarán los precios para maximizar las ganancias. Si parece que no se van a llenar, disminuirán los precios para atraer más reservas. Esto significa que los precios pueden subir o bajar a medida que se acerca la fecha de tu viaje. Pero es más probable que los precios suban en lugar de bajar, por lo que generalmente no es una buena táctica esperar para reservar tu viaje. Si intentas reservar de último momento para obtener una buena oferta, eso solo funcionará si aprovechas una oferta cuando la veas y planificas tus vacaciones en torno a eso. Si sabes exactamente dónde y cuándo vas a ir con antelación, entonces generalmente es mejor reservar lo antes posible.
Estacionalidad
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Casi cualquier destino que puedas visitar tiene una temporada alta y una temporada baja, con precios que típicamente son mejores en la temporada baja debido a la disminución de la demanda. A medida que un destino cambia entre temporada alta y baja, también tendrás la temporada intermedia, que proporciona un momento óptimo para los viajeros con presupuesto limitado. Reservar en torno a la estacionalidad es una gran manera de usar la fijación de precios dinámica a tu favor, ya que es fácil predecir cuándo bajarán los precios. Una búsqueda rápida en Google te dirá cuándo es la temporada alta de un destino y por qué la gente se aleja de la temporada baja. Puede que no parezca valga la pena reservar un crucero durante la temporada de huracanes, pero ¡para eso está el seguro de viaje!
Fecha y Hora
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Además de la estacionalidad, el día de la semana y la hora del día también pueden afectar los precios, especialmente con vuelos. Los vuelos serán más caros si vuelas en el fin de semana, siendo el martes y el miércoles los días que generalmente ofrecen los mejores precios. Los vuelos muy temprano por la mañana y muy tarde en la noche también experimentan menos demanda, por razones obvias. Si puedes optar por un horario de vuelo inconveniente, esta puede ser otra manera de aprovechar la fijación de precios dinámica. Los hoteles también tienen diferentes precios para diferentes días, siendo los fines de semana a menudo más caros. Sin embargo, debes tener cuidado, ya que algunos eventos como conferencias y conciertos pueden causar un aumento de precios a mitad de semana. Consulta los eventos locales y asegúrate de que no haya eventos importantes para evitar pagar más por tu vuelo y hotel.
